martes, 31 de julio de 2018

Drakar, restaurante, Hoyos del espino

Nunca podría pensar que en pleno mes de julio, fuéramos a estar a 10 grados... pero claro, es que estamos en Gredos... y eso se nota.
Nos comentan que han reservado en un sitio para cenar... y a pesar de que hemos terminado de comer a las 6 de la tarde, sin hambre ni sed, vamos a cenar... y decimos... "bueno, unas ensaladitas y ya"... Ya... jajajja.
Y la reserva había sido en el Drakar.  Si estás por la zona... ni lo dudes. pero ni un momento. Pero llama a reservar.

Por cierto, su helado de violetas me ha dado una idea... Malditos roedores...






No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
;