Cruzas el río, y al llegar a la fuente a la izquierda...
En medio de frutales y totalmente escondidas se encuentran estas casitas, la Casa Manantalia, un lugar ideal para ir a descansar, leer o hacer rutas.
Las casas están decoradas con mimo y la estancia se hace de lo más agradable.
Si a eso le añadimos que ya estamos en otoño, el colorido de los alrededores es brutal.
Y como estábamos rodeados de manzanos... hice un postre la mar de apañao...
Volveremos...
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