Efectivamente, la verdad es que pilla un poco a trasmano, pero como aquí hablo de comer, no puedo dejar de hacer mención al restaurante español BCN ...
Situado en la calle Peel Street, en pleno Soho de Hong Kong, este pequeño restaurante es un verdadero placer, y no sólo para el sentido del gusto.
Si además tienes la suerte de que sea un día poco transitado y que Edgar (ya lo siento, pero siempre recuerdo a Allan Poe) no esté muy atareado, entonces el placer de que te vaya contando los platos y te diga, por ejemplo, cómo ha conseguido meter a las gambas de Palamós en su menú, entonces la cena será perfecta.
No vamos a engañarnos, no es barato, pero de vez en cuando un homenaje es un regalo para los sentidos ...
(Sólo puedo ponerle una pega ... y es que durante toda la cena no paró de sonar un disco de Pau Dones... y es que yo le tengo una manía que no puedo con él).
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